LA PEQUEÑA HISTORIA SE VOLVIO GRAN HISTORIA
LA HISTORIA DEL AYER GUSTA SER LEÍDAS
La tradición oral de nuestro pueblo recogida en este libro, transmitida a través de distintas generaciones por personas sencillas y amantes de lo nuestro.
En la pasadas navidades la lotería trajo a mi familia el gran don de la salud, que no es poco, y a mí además la grata sorpresa de ver cumplido un sueño, la comunicación, por parte del excelentísimo alcalde Don José María Ramírez, de la publicación de “Mi pequeña historia”.
La alegría y felicidad fue tan enorme que me dio nuevas ilusiones y ánimos para retomar el camino que, por cansancio, había intentado dejar.
Volcándome con nuevas energías en este proyecto, para que hoy todos disfrutemos con este libro convertido en realidad, para disfrute de todo aquel que quiera depositar su vista en líneas llenas de brisas de recuerdos e impregnadas de tradiciones, que se deslizan por letras, puntos y comas, haciendo sentir roce de presencias que se desdoblan por las páginas, queriendo salir al presente y comunicar formas de vidas y añoranzas.
Hubiera sido una pena si estos relatos se hubieran ignorado, cuando en su día fueron contados con deleite y detalle por sus protagonistas, que desgranaban sus recuerdos con deseos de transmitir y ver publicado un retazo de sus vidas anónimas.
Aún recuerdo el agradecimiento mostrado por el hecho de ser escuchados y valorados, la suavidad de sus voces para ser mejor entendidos, y sobre todo la sonrisa, en aquellas caras curtidas, cuando el recuerdo contado tomaba vida y retomaban un viaje anclado en el pasado, del que un lejano día se apearon.
Sus conversaciones, estaban llenas de sapiencias y conocimientos y para ellos un honor contar sus vivencias, que les hacían sentir se importante al que dar constancia de conocimiento de pequeñas o grandes historias de Almendralejo ya olvidadas, pero con la ilusión de que permanecieran, en párrafos, sus recuerdos y emociones, y un día su nombres y palabras escritas pudieran ser leídas por seres queridos de generaciones venideras.
Hoy me siento feliz sabiendo que las historias de los protagonistas de este libro es un legado que perdurará.
Llegar hasta hoy no ha sido fácil, por tener que luchar y llamar a muchas puertas, las cuales estaban cerradas.
Me queda la grata satisfacción de haber, escuchado a personas entrañables, llenas de filosofía de la vida.
Como fue Félix Bote, cuya sabiduría de la vida y sencillez, unido a su saber estar nunca olvidaré.
Siempre tendré en el recuerdo a Inés Sánchez Torres, que por unos días, no avisto un retazo de su vida publicad.
Son tantas las vivencias escuchadas con todo lujo de detalle que me siento feliz de haber tenido la suerte de conocer a los protagonistas de mi libro. Solo deseo que la sencillez, y cariño con que han sido escritos estos relatos, logren hacer que os sintáis a gusto al leer mi modesta escritura, realizada con el lenguaje de un corazón inspirado con el cariño de aportar más información de nuestros mayores.
Cuya recopilación de historias de Almendralejo comenzó hace años, por el entusiasmo y la inquietud de captar la esencia de nuestras vivencias, que me llevaron a indagar y recabar todas aquellas informaciones sobre las costumbres populares que facilitase su transmisión y la salvaguardasen del olvido.
Y si tuviese que remontarme a su origen, tendría que remitiros a nuestra abuela Isabel Cano, “LA NENA”, mujer de excepcional memoria que, sentada en su mesa de camilla ,desgranaba el vivir de una población narrando las anécdotas cotidianas .
Despertando el interés de grandes y pequeños hasta el punto de registrar sus palabras en una de esas grabadoras de no hace muchas décadas , ahora piezas de museo para las nuevas generaciones.
Tras la desaparición de mi abuela, mi padre, José Coronado, quiso continuar su legado de conocimiento popular.
Sapiencia que iba depositando en libretas, hojas sueltas, folios que el mismo cosía con aguja y lana, papel de estraza ….,toda superficie susceptible de ser escrita resultaba insuficiente para acoger tamaña proyección de su memoria : personajes, costumbres, calles, oficios ya desaparecidos , mapas de caminos (cuyo trayecto precisaría varios días de recorrido), que desfilaban inagotables por cualquier rincón de casa
Recopilación que empezaría en 1995 a tomar contacto con los lectores en la revista quincenal “La Comarca “ y el periódico mensual la “ Capital” y en la emisora municipal Radio Comarca de Barros, ayudada por Fernando Sierra, haciéndome compartir con vosotros a través de la difusión de las ondas la labor iniciada, aportando y comunicando conocimientos de vivencias de distintas generaciones de Almendralejo.
Relatos que desde el principio interesaron y todo lo que se publicaba que aportan otros cauces de trasmitir e información popular, despertando interès por saber la vida diaria con que se había ido haciendo las historias de un pueblo sus moradores y el gusto por lo nuestro.
Ahora, a un paso de una nueva década, se me ha brindado la oportunidad de cumplir un sueño: como es la edición de este libro donde los protagonistas somos nosotros, todo un pueblo .
Desde el amor a Almendralejo nace el deseo de reflejar lo que fuimos, de dónde venimos y el orgullo de formar parte de nuestra ciudad.
Quedando en cajones recopilaciones por contar, aguardando, en espera, de poder ser un día, leídos y publicadas.
Gracias a mi hermana Kati y a mi Hijo José Borja, que me ayudaron en este proyecto, a los habitantes de Almendralejo y al excelentísimo alcalde, Don José Maria Ramírez que ha hecho posible que la publicación de este libro sea una realidad.
En la pasadas navidades la lotería trajo a mi familia el gran don de la salud, que no es poco, y a mí además la grata sorpresa de ver cumplido un sueño, la comunicación, por parte del excelentísimo alcalde Don José María Ramírez, de la publicación de “Mi pequeña historia”.
La alegría y felicidad fue tan enorme que me dio nuevas ilusiones y ánimos para retomar el camino que, por cansancio, había intentado dejar.
Volcándome con nuevas energías en este proyecto, para que hoy todos disfrutemos con este libro convertido en realidad, para disfrute de todo aquel que quiera depositar su vista en líneas llenas de brisas de recuerdos e impregnadas de tradiciones, que se deslizan por letras, puntos y comas, haciendo sentir roce de presencias que se desdoblan por las páginas, queriendo salir al presente y comunicar formas de vidas y añoranzas.
Hubiera sido una pena si estos relatos se hubieran ignorado, cuando en su día fueron contados con deleite y detalle por sus protagonistas, que desgranaban sus recuerdos con deseos de transmitir y ver publicado un retazo de sus vidas anónimas.
Aún recuerdo el agradecimiento mostrado por el hecho de ser escuchados y valorados, la suavidad de sus voces para ser mejor entendidos, y sobre todo la sonrisa, en aquellas caras curtidas, cuando el recuerdo contado tomaba vida y retomaban un viaje anclado en el pasado, del que un lejano día se apearon.
Sus conversaciones, estaban llenas de sapiencias y conocimientos y para ellos un honor contar sus vivencias, que les hacían sentir se importante al que dar constancia de conocimiento de pequeñas o grandes historias de Almendralejo ya olvidadas, pero con la ilusión de que permanecieran, en párrafos, sus recuerdos y emociones, y un día su nombres y palabras escritas pudieran ser leídas por seres queridos de generaciones venideras.
Hoy me siento feliz sabiendo que las historias de los protagonistas de este libro es un legado que perdurará.
Llegar hasta hoy no ha sido fácil, por tener que luchar y llamar a muchas puertas, las cuales estaban cerradas.
Me queda la grata satisfacción de haber, escuchado a personas entrañables, llenas de filosofía de la vida.
Como fue Félix Bote, cuya sabiduría de la vida y sencillez, unido a su saber estar nunca olvidaré.
Siempre tendré en el recuerdo a Inés Sánchez Torres, que por unos días, no avisto un retazo de su vida publicad.
Son tantas las vivencias escuchadas con todo lujo de detalle que me siento feliz de haber tenido la suerte de conocer a los protagonistas de mi libro. Solo deseo que la sencillez, y cariño con que han sido escritos estos relatos, logren hacer que os sintáis a gusto al leer mi modesta escritura, realizada con el lenguaje de un corazón inspirado con el cariño de aportar más información de nuestros mayores.
Cuya recopilación de historias de Almendralejo comenzó hace años, por el entusiasmo y la inquietud de captar la esencia de nuestras vivencias, que me llevaron a indagar y recabar todas aquellas informaciones sobre las costumbres populares que facilitase su transmisión y la salvaguardasen del olvido.
Y si tuviese que remontarme a su origen, tendría que remitiros a nuestra abuela Isabel Cano, “LA NENA”, mujer de excepcional memoria que, sentada en su mesa de camilla ,desgranaba el vivir de una población narrando las anécdotas cotidianas .
Despertando el interés de grandes y pequeños hasta el punto de registrar sus palabras en una de esas grabadoras de no hace muchas décadas , ahora piezas de museo para las nuevas generaciones.
Tras la desaparición de mi abuela, mi padre, José Coronado, quiso continuar su legado de conocimiento popular.
Sapiencia que iba depositando en libretas, hojas sueltas, folios que el mismo cosía con aguja y lana, papel de estraza ….,toda superficie susceptible de ser escrita resultaba insuficiente para acoger tamaña proyección de su memoria : personajes, costumbres, calles, oficios ya desaparecidos , mapas de caminos (cuyo trayecto precisaría varios días de recorrido), que desfilaban inagotables por cualquier rincón de casa
Recopilación que empezaría en 1995 a tomar contacto con los lectores en la revista quincenal “La Comarca “ y el periódico mensual la “ Capital” y en la emisora municipal Radio Comarca de Barros, ayudada por Fernando Sierra, haciéndome compartir con vosotros a través de la difusión de las ondas la labor iniciada, aportando y comunicando conocimientos de vivencias de distintas generaciones de Almendralejo.
Relatos que desde el principio interesaron y todo lo que se publicaba que aportan otros cauces de trasmitir e información popular, despertando interès por saber la vida diaria con que se había ido haciendo las historias de un pueblo sus moradores y el gusto por lo nuestro.
Ahora, a un paso de una nueva década, se me ha brindado la oportunidad de cumplir un sueño: como es la edición de este libro donde los protagonistas somos nosotros, todo un pueblo .
Desde el amor a Almendralejo nace el deseo de reflejar lo que fuimos, de dónde venimos y el orgullo de formar parte de nuestra ciudad.
Quedando en cajones recopilaciones por contar, aguardando, en espera, de poder ser un día, leídos y publicadas.
Gracias a mi hermana Kati y a mi Hijo José Borja, que me ayudaron en este proyecto, a los habitantes de Almendralejo y al excelentísimo alcalde, Don José Maria Ramírez que ha hecho posible que la publicación de este libro sea una realidad.
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