CERNÍCALO PLUMILLA
HE ESCUCHADO QUE VA HAN DAR LE SUELTAS A ESTAS AVES SI HE OÍDO BIEN VA A SER EN NAVARRA.
HACE DOS AÑOS TUVE LA GRAN SUERTE DE AXISTIR A UNA SUELTA, OS DIRÉ QUE FUE UNA DE LAS TARDES MÁS BELLAS QUE MI VIDA ME PUEDA DAR .
FUIMOS INVITADAS POR PEPE ANTOLIN Y SU HIJA.
TUVO LUGAR, EN LA MESAN MÁS BONITA Y YA OLVIDADA QUE MIS OJOS VOLVÍAN A VER.
DIOS, VER AQUELLOS POLLUELOS Y DARLE SUELTA, COMO DISFRUTE.
ANTES NOS DIERON EL HONOR DE PONERLE EL NOMBRE QUE DESEÁRAMOS.
RECUERDO QUE FAVIOLA LE PUSO, ADRIÁN, POR SU NIETO, MI HERMANA COMO ERA HEMBRA,”MANUELA” EN HONOR A MI MADRE Y YO LA VERDA QUE NO RECUERDO PERO DE SEGURO QUE SERÍA EL NOMBRE DE UNO DE MIS HIJOS.
VER LOS CERNÍCALOS COMO UNA VEZ EN LIBERTAD, SE POSABAN SOBRE LA MESANA O JUNTOS VOLABAN HACÍA ENCINAS CERCANAS.
LA PUESTA DE SOL, HACIA QUE EL LUGAR TOMARA COLORES QUE LOS RAYOS DE SOL DESPRENDÍAN Y JUGABA CON TONALIDADES, QUE DABAN AL SITIO LA BELLEZA QUE SOLO SE PUEDE CONTEMPLAR ALLÍ.
LA MEZCLA DE COLORES EN UN ATARDECER DONDE LA BRISA A LA CAÍDA DE LA TARDE VA LEVANTANDO HUMEDAD MEZCLADO CON EL OLOR QUE DESPRENDE A PAJA, SENSACIONES OLVIDADAS DE LA ERA DE MI NIÑEZ.
SIEMPRE RECORDARE AQUEL DÍA LA SENSACIONES DE TENER EL POYUELO EN MIS MANOS LOS PALMITOS DE SU CORAZONCITO SUS GARRAS QUE SE CLAVABAN EN MI MANO VUSCANDO LA LIVERTAD.
UNA ESPERIENCIA QUE SI TENEIS OCASIÓN DE VIVIRLA NO LA PERDAIS EN LA MESA.
ISABEL CORONADO
HE ESCUCHADO QUE VA HAN DAR LE SUELTAS A ESTAS AVES SI HE OÍDO BIEN VA A SER EN NAVARRA.
HACE DOS AÑOS TUVE LA GRAN SUERTE DE AXISTIR A UNA SUELTA, OS DIRÉ QUE FUE UNA DE LAS TARDES MÁS BELLAS QUE MI VIDA ME PUEDA DAR .
FUIMOS INVITADAS POR PEPE ANTOLIN Y SU HIJA.
TUVO LUGAR, EN LA MESAN MÁS BONITA Y YA OLVIDADA QUE MIS OJOS VOLVÍAN A VER.
DIOS, VER AQUELLOS POLLUELOS Y DARLE SUELTA, COMO DISFRUTE.
ANTES NOS DIERON EL HONOR DE PONERLE EL NOMBRE QUE DESEÁRAMOS.
RECUERDO QUE FAVIOLA LE PUSO, ADRIÁN, POR SU NIETO, MI HERMANA COMO ERA HEMBRA,”MANUELA” EN HONOR A MI MADRE Y YO LA VERDA QUE NO RECUERDO PERO DE SEGURO QUE SERÍA EL NOMBRE DE UNO DE MIS HIJOS.
VER LOS CERNÍCALOS COMO UNA VEZ EN LIBERTAD, SE POSABAN SOBRE LA MESANA O JUNTOS VOLABAN HACÍA ENCINAS CERCANAS.
LA PUESTA DE SOL, HACIA QUE EL LUGAR TOMARA COLORES QUE LOS RAYOS DE SOL DESPRENDÍAN Y JUGABA CON TONALIDADES, QUE DABAN AL SITIO LA BELLEZA QUE SOLO SE PUEDE CONTEMPLAR ALLÍ.
LA MEZCLA DE COLORES EN UN ATARDECER DONDE LA BRISA A LA CAÍDA DE LA TARDE VA LEVANTANDO HUMEDAD MEZCLADO CON EL OLOR QUE DESPRENDE A PAJA, SENSACIONES OLVIDADAS DE LA ERA DE MI NIÑEZ.
SIEMPRE RECORDARE AQUEL DÍA LA SENSACIONES DE TENER EL POYUELO EN MIS MANOS LOS PALMITOS DE SU CORAZONCITO SUS GARRAS QUE SE CLAVABAN EN MI MANO VUSCANDO LA LIVERTAD.
UNA ESPERIENCIA QUE SI TENEIS OCASIÓN DE VIVIRLA NO LA PERDAIS EN LA MESA.
ISABEL CORONADO
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