HERMANDAD DE COSTALEROS DE SAN JOSÉ

 

 

Semana Santa, olor, a cera y a recuerdos de otras procesiones que están en la memoria de Álvaro Ortiz, gran cofrade y amante de todo aquello que pueda se bueno para nuestra ciudad.

 

En la Semana Santa del año 2001, me contó como se formo la Hermandad de Costaleros de San José, el cual siente pasión y satisfacción al narrar esta historia que es la de unos valientes como él dice.

 

Todo comienza, cuando en 1986, van a una emisora de radio que empezaba a emitir en Almendralejo, para difundir por las ondas, la idea de hacer una hermandad de costaleros.

 

Cuya primera junta directiva estaba formada por: Francisco Morán como presidente, Juan Antonio González vicepresidente, Antonio Díaz secretario, José María Blanco, Manuel Herrero, Ángel Herrero, José Luis Otero,  José María Gómez, Santos Garcia, Mateo Donoso, Diego Rodríguez,  Una vez confeccionada la junta, buscan a treinta personas más entre ellas a Álvaro.

 

El 21 de mayo de 1987 se acuerda que el uniforme fuera: la camisa blanca, con escudo y emblema de la hermandad.

 

El pantalón de los costaleros debía ser azul con fajín terminado en bolas doradas.

 

El 25 de junio se ponen en contacto con Don Tobías, entonces párroco de la Purificación de Almendralejo.

 

Para ser Grupo Organizado de Costaleros, pidiendo que la hermandad de San José sea la encargada de portar el paso de la patrona, Nuestra Señora de la Piedad.

 

En octubre del mismo año, se nombra nueva directiva, siendo nombrado presidente,

Álvaro.

 

Durante estos años, han tenido: entradas de nuevos costaleros, bajas por marcharse a otras hermandades o cofradías, pero todos guardan un grato recuerdo de su primera hermandad.

 

Pero hay amigos costaleros que se fueron, no su espíritu, que esta entre sus compañeros costaleros y en el cielo, portan en sus hombros a su santo patrón, y a pasos divinos.

 

Costaleros inolvidables como: Fernando Espíritu Santo, buen compañero y colaborador,  Marcos Suárez Hernández, persona buena que tanto hiciera por la hermandad, persona gratamente recordada por ser buen marido, padre ejemplar y  gran costalero, del paso de la virgen de la Esperanza, de la que sintiera gran fervor, y fe.

 

Su sitio quedo vació, su hueco en la trabajadora, ocupado por su recuerdo, debajo del paso sus compañeros oyen sus palabras sencillas, cuando en el silencio de la noche, los costaleros que van debajo, al hacer el paso corto, piensan en los que marcharon y en la promesa.

 

La primera vez que sacaron a la patrona, fue el cinco de agosto de 1988.

Nunca olvidaran, los que tuvieron la suerte de llevarla, ni la noche del 14 de agosto de 1988, de vuelta a su ermita, fue grande la emoción sentida, por los costaleros, al ver, tantas personas viendo por primera vez a su virgen en hombros.

 

El 25 de noviembre de 1988, se aprobaron los estatutos, de la hermandad, estando desde este momento, dispuesto ayudar a los demas hermanos de Almendralejo, para sacarle a hombros los pasos.

 

El primer año Professional, de la Hermandad y Cofradía del Santísimo Cristo de la Merced, les pidieron ayuda para llevar a María Santísima de la Merced en su Misterio Doloroso.

También en 1990, sacaron a Nuestro Señor Resucitado, en hombros.

 

En 1993, van a un programa de radio y son escuchados en la localidad de Santos de Maimona, por los cofrades de Nuestro Padre, Jesús Nazareno, que les piden que si pueden ayudarles el Martes Santo.

 

 Yendo también el jueves Santo, Gustando mucho la forma de llevar, las imágenes, siendo un orgullo para los hermanos de costaleros, de San José.

 

Y a partir de este año, la semana Santa, empezaría a resurgir, en los Santos de Maimona, al igual que en nuestra ciudad.

 

Las cofradías empiezan a quitar las ruedas a los pasos y a sacar a hombros o a Costal, que da igual, pues el fin es el mismo, ser portador de cristo y su Santa Madre.

 

La hermandad, esta consolidada gracias a Dios y al esfuerzo de muchas personas.

En el año 2001 eran cien costaleros, y los capataces: Manuel Rosado, Manuel Fisico, Antonio Esperilla, Alejandro Adames.

 

Habiendo niños, entre cuatro y diez años que seguían los pasos, con sus padres, tíos o hermanos, por ser costaleros de sitio, en la hermandad.

 

La cofradía del Cristo Resucitado, en agradecimiento en 1996 le otorgaría el escudo de la junta de cofrade, de Penitente, por su trabajo desinteresado.

 

En 1998, un grupo de bordadoras, de nuestra ciudad, les bordan el estandarte, no teniendo palabras para expresar su agradecimiento, a estas mujeres.

 

La hermandad se caracteriza por el compañerismo, entrega sin ningún beneficio, solo la satisfacción, del trabajo bien realizado, de ser portador, de tan gran carga.

 

Siendo su recompensa la de pasear la procesión, por las calles, de Almendralejo y de otros pueblos o ciudades donde sean requeridos y necesitados.

 

Y piden a los jóvenes, que un año vivan la Semana Santa, dentro de la hermandad, debajo de un paso de cualquier hermandad.

 

Están seguros que repetirán, harán amigos, dispuestos ayudarle, que no les fallarán.

 

Sentirán diferente la Semana Santa, sintiendo esa paz interior, que cuando se termina, estas deseando, que vuelva otra vez.

 

Alvaro cuando me contó todo esto, que os relato, pedía fuerzas, para seguir, muchos años más, portando a Jesús el Cautivo, y a su Santa Madre la virgen de la Esperanza.

 

 Les da gracias a todas las personas, que, de una forma u otra, le ayudan a llevar a buen punto la Hermandad de Costaleros de san José.

 

Isabel Coronado