ALMENDRALEJO UNO DE ENERO

Manuela siempre con sonrisa en su cara y alma, mirando siempre a un horizonte pues en el estaba el futuro y el fin de penas y problemas.
Manuela con su hermano Antonio viajando por el firmamento.
Manuela de claro por fuera y por dentro, para todos tuvo cariño y amor.

Ha empezado un año, lleno de inquietudes las cuales vienen envueltas en papeles de incógnitas.

Todos deseamos caminar por los días de 2010, con tranquilidad y que se baya desarrollando nuestras ilusiones.

Cada década, trae nuevos abances, que personas ya tienen ingeniadas para que todos nosotros dependamos de los que sus varitas mágicas dispongas.

El uno de enero fue el día de las Manolas-os.

Dicen que interne navega por el espacio y llega ha todos sitios..

Pues si es así quiero que esta carta llegue a Manola, hace años que emprendió un viaje y desde ese día no la veo, a veces en sueño he querido estar con ella pero nunca lo he logrado.

Pero la noche del uno de Enero, logre atravec de un sueño estar un ratito con ella.

Fue el mejor regalo que esta navidad me ha dado. Breve momento, en el que pude volverla ha encontrar, al abrir la puerta de su casa y verla asomar al quicio del comedor, su cara sonriendo pidiendome que me acercara, senti el abrazo, el calor de sus besos y su mano acariciándome el pelo como ella solo lo hacia.

Le he contado tatas cosas que ella ya sabía, me he vuelto a refugia en el regazo de Manuel, para muchos una mujer más de esta tierra que engulle a las personas y pronto son estrellas en el firmamento solo divisada por aquellos que la quisimos y nunca olvidamos.

Fue una mujer como otras de gran talento nunca apreciados ni valorados.

A veces pienso que el día en que emprendió aquel viaje se equivoco de anden y tomo el tren equivocado, pues le quedaban tantas cosa por hacer y conocer, pero eso es lo que en definitiva nos pasa ha todos.

Manola te necesito en estos tiempos, eran tan sabios tus consejos, que son necesarios para tomar decisiones.

Quiero que la felicitación de tu santo te llegue y que sepas que las Navidades han sido desde que tu te fuistes diferentes, ya no estás con migo en la cocina preparando las viandas las cuales tengo que realizar a solas, esto me resulta triste y solitario.

Actividad en la que para sentir tu compañía, pongo aquel disco que tanto nos gustaba en estos días,a las dos escuchar y en la cena, entonabas, aquella canción de los "Campanilleros".

Que bien cantabas, me parece verte con la cacerola en la mano y cantando mientras batías huevos y saboreabas salsas, hay mi querida Manuela que bonito eran aquellos días de navidad que ya nunca volverán.

TE QUIERO MUCHO MAMA--