HOY HE CAMINADO

Hoy he caminado al lado de mi hermana, por padrones llenos de un barro tiernos que impregnaba  mis zapatilla de suaves caricias  en formas de resbalones que me hacían hundir en una tierra  fácil de moldear, donde los dibujos de las suela iban quedando en la tierra, formando huellas que me perseguían sin poder a delatarme.

Los pasos se unían y sin dejar se dominar iban donde ellos querían, por más que le indicábamos una dirección, se resistía y volvía hacia donde ellos desde que salimos de casa querían ir a un lugar y allí Nos depositaron sobre ellas en una hermosa pradera de verdores diversos donde la tierra removida era tan negra y fina que se hacia difícil nominarla.
 La alberca querida de origen árabe, estaba siendo recuperada del abandono sufrido durante tantos años, viendo pasar a tantos paisanos sobre el camino Charnecal antaño serpenteado de encinas que cobijaban las jinetas que rápidas lo cruzaban.
El camino se apodero del nombre del regacho Charnecal, al ser este cruelmente tapado y haciéndolo
 que el con rabia cuando las lluvias se apoderaban de él, surcaba su propiedad cauce y desbocado, corría, buscando  a sus primos arroyo Airo, par unirse con Cagancha,, Las Picadas, Zancho, Tiza y todos unidos  desencovaban en el Arnina, que se hacia fuerte y corría con aguas sonoras invadidas de floras y anfibios  que corrían para aportar sus aguas al Guajira y allí se sosegaban sus aguas que entre riveras corrian regando y presumiendo de aguas y orillas frondosas.
ISABEL CORONADO.