CONVENTO DE FR FRANCISCANOS DESCALZOS EN ALMENDRALEJO
El tiempo es un reloj con agujas grandes, y entre sus minuteros con rapidez pasa nuestra vida.Para dar paso a nuevas gentes con inquietudes que hagan mover la manivela que hace girar el mundo, estos creerán que son eternos.
Como pensaron los fundadores del convento de San Antonio conocido por todos los habitantes del lugar, es de los más queridos y emblemáticos de Almendralejo.
Pero en el pasado al pasar por ese lugar, lo hacíamos aligerando el paso al caminar, por lo solitario y poco iluminado que estaba por la noche.
Pero su entorno siempre estuvo rodeado de moradores que participaron en la vida del pueblo, pues eran personas emprendedoras deseosos de avanzar pues es la característica de las personas que habitan este pueblo.
Fue un convento regentado por religiosos,como fray Pedro de Almendralejo, nació en Almendralejo y fue el primer escritor, que en 1600 escribió una obra y la imprimió en la imprenta, de "Hijos de Pedro Gutiérrez",en Almendralejo.
Fray Francisco de Almendralejo, se mortificaba liando sobre su cuerpo alambres y cubriéndose con un chaleco de piel de cabra.
Caminaba mirando hacia el suelo evitando y rehuyendo, mirar a las mujeres, murió de un enfriamiento.
Pero los religiosos tuvieron una gran preocupación por la cultura, se esforzaron por enriquecer la biblioteca del convento, llegando a tener a finales del siglo XVIII, 1871 libro, diez libros de folios y catorce legajos, que los frailes habían ido recopilando a lo largo de los años, esfuerzo que sería baldío, al estallar la guerra de la Independencia, al entrar en el pueblo las tropas napoleónicas que se adueñan y convierten el convento en cuartel, expulsan a los frailes de él.
Cuando termina la contienda los religiosos regresan al convento que ven destrozado y amenazando ruina, la congregación después de una guerra queda en condiciones precarias, intentan salir adelante, pero en 1835 con la ley de desamortización de Mendizábal el edificio es expropiado por el estado y el 9 de septiembre de 1836 dejan el convento, al que se le da diversos usos. Fue viviendas para familias pobres, y pajar o almacenes de trigo.
Una parte, del convento, sería convertida en fábrica de harina, panadería, época en que se hace la chimenea que hasta hoy se conserva.
También fue fábrica, de jabón y años después, fabrica de aderezo de aceitunas de verdeo, cuyo dueño fue Garbancito.
También hubo un intento de poner en marcha una fábrica de fideos con tecnología avanzada, que no llegaría a funcionar.
El convento de San Antonio a lo largo de los años sería utilizado para diversos usos y por el ayuntamiento para guardar objetos embargados.
Y Utilizado también de hospedería para misioneros, que visitaban la ciudad y como cárcel para sacerdotes contrarios al absolutismo, por haber firmar un manifiesto oponiendo se al mandato del rey Fernando VII, y en represión eran recluidos el convento.
En 1881 sus de pendencias alojarían el colegio de secundaría de N,S de la Piedad de enseñanza privada, trasladada do años después a Cultural Santa Ana.
En una de las habitaciones de la parte superior, cedidas por el ayuntamiento vivió el sacerdote Pascasio Fernández, que vivía en la miseria, todo se lo daba a los pobres, pero murió en soledad.
El convento sería cerrado y así estuvo durante muchos años y cuando pasabas por del lugar lo hacía rápido temiendo miedos infundados en relatos escuchados, en las largas noches de invierno mirando la llama de la lumbre de la chimenea mientras escudaban relatos exagerados al irse contando a lo largo de los años, del misterioso pasadizo secreto, utilizado por los frailes, de su crista misteriosa debajo de la iglesia,cuyo suelo esta cubierto de losas mortuoria , pues los frailes al morir eran enterrados y las losas con un numero tapaban las sepulturas.
La iglesia continuaría abierta para el culto y en ella sería enterrada la madre del poeta Meléndez Valdez.
Poeta que vivió y curso sus primeros estudios en Almendralejo antes de marchar a Madrid.
El convento sería comprado por los ascendientes de Félix García de la Peña y la huerta sería adquirida por los Marqueses de Monsalud y Fernando Villalobos.
Los frailes en la parte conocida por “Dehesa de los Descalzo”, tenia una gran zona de cultivos diversos, con una casa de labranza, construida en la parte izquierda de la curva de la carretera de Alange, enfrente de la entrada a la finca de Buen aval. Nada queda de lo que fue solo es tierra “Villa ara.
La vivienda de los religiosos estaba pegando al puente y al regacho, la huerta tenia un cenador y un pozo, y en una de sus paredes mirando al saliente había una pared llena de pequeños salientes en forma de nichos donde se posaban y anidaban las palomas mensajeras con las que se comunicaban los frailes del pueblo.
En la huerta del convento había otra pared de igual características, pero mirando al poniente.
A ultimo del siglo XIX Don Jerónimo Caballar intento restaurar el convento, mal traído por los avatares de la vida, haciendo mejoras como la casa de la ermitaña en 1900.
Los años unidos a la vida van pasando y trasformandose los recintos que el tiempo deteriora, y así lo que fue una huerta frondosa mientras los frailes la tuvieron luego convertida en un jardín por los sucesivos compradores como fue el Marques de la Encomienda, lugar donde hubo gran variedad de árboles y plantas que el tiempo hicieron perecer.
Pues bien en este lugar años después hubo una representación de un belén viviente siendo San José Alonso Arenas y su señora la virgen y uno de sus hijos el niño Jesús.
El convento se fue deteriorando no su ermita que con el dinero de los fieles se iba manteniendo por el gran fervor que se ha tenido siempre a S.Antonio, imagen que se encuentra en el altar mayor de la iglesia.
Muchas fueron sus ermitañas que vivían en la casita inmediata totalmente dedicadas a su cuido de las más recordadas están Concha y Paca Calero cuidadora de la ermita de San Antonio.
Aquella huerta que los frailes mantenían con riegos de aguas sacadas con una noria, después de pasar por un total abandono,como un cenit, surgió y se convirtió en uno de los rincones más vellos de Almendralejo, con árboles de especies diversas que han logrado sobrevivir al igual que los frutales y almendros centenarios.
Sitio que trasmite paz y tranquilidad en un tiempo lleno de prisas y desasosiego.
En el recuerdo de muchos esta el cine de verano “Alegría” cuyo dueño fue Navia.
Lugar lleno de enredaderas, que en las noches estivales derraban perfumes, mientras los espectadores veían películas, en el descanso, había una cantina donde se tomaban bebidas y helados.
El Convento de San Antonio, después de su declive, seria restaurado, pues el tiempo al ir pasando, fue con venciendo, que era necesario, su restauración,y darle utilidad al edificio.
Convertir sus de pendencias, en la universidad popular, biblioteca ect.
Y Unido al convento se encuentra el Conserva torio de Almendralejo, lugar donde los Almendralejenses a demás de aprender música nos deleitamos escuchando a grandes artistas y alumnos aventajados.
1 Comments:
Gracias por esta interesante historia que he buscado durante mucho tiempo. Yo estudié segunda enseñanza allí y me alejé mucho de todo después. Encontrar este recuerdo ha sido un placer.
Carmen
By Anónimo, at 7:39 p. m.
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