Mi pequeña historia de Almendralejo

domingo, septiembre 01, 2013

PUESTA DE SOL SOBRE LOS VIÑEDOS DE TIERRA DE BARROS, EN ALMENDRALEJO




Si tu pisas esta tierra, de  surcos  perfectos alineados, pensaras que la pintura copio su arte de este lugar.

Catar en tan luminoso lugar  un buen mosto de sabor grato al paladar, que al deslizase por tus papilas de gustativas,  iras saboreando y valorando el saber de tan buen hacer.

 Cultivar cepas legendarias, por labradores de tradición en un saber y arte, que de generación en el saber se ha ido trasmitiendo y llevado a su entendimiento.

Ver una puesta de Sol en Tierras de Barros, es ver hundirse el sol en unos surcos que van a su encuentro, buscando su calidez, para que sus mieses maduras estén esperando manos mimosas, que cortan con destrezas racimos maduros que caen en los brazos que lo llevaran a lagares, donde serán convertidas en rico mosto.

 Elaborados por  enólogos que aran de él el mosto mejor saboreado y degustado por aquel que visite bodegas  del saber donde duermen los vinos de Tierra de Barros.

ISABEL CORONADO

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