Mi pequeña historia de Almendralejo

domingo, septiembre 22, 2024

  

 ANDAR



Por tanto, caminar por caminos sin momentos, por intentar de ser yo.

Pocas cosas, de juguete serví de mistifica los sueños que no eran míos.

Encuentro tan diferente, me siento que olvide en el camino tantos sentimientos, que siento en perchas colgados siniestros con amores secos de sencilla.

Noches de juegos olvidados que lo mejor se quedó sin sentir.

Me engañe sintiendo hoy, que me engañe, los demás nada ofrecían.

Eran espantos en mi vida, que surgían y se iban por puertas abierta.

Cuanto corrí, pensando que era mejor para todos, estar despiertas superando, descubrimientos que nada aportaban cada día.

Jugaron con mis sentimientos me revele, pero el viento tapo con el polvo del sendero, olvidos quedados en ramas de sentimientos, me descubrieron, que yo era yo, que lo demás era nada.

La vida se fue en pensamientos, tarde encontré lo que la vida comenzó a descubrirme.

 Los días pasados fueron rápidos y pensando que los llantos eran los que esperaban al final del camino.

Pero aquellos senderos vacíos que salían al encuentro escritos en las hojas de ramas, de árboles que salían a nuestro encuentro.

Llegue a destiempo sobre aquella playa plagada de olas que nunca alcanzamos sobre nuestros pies.

Seguiremos sin encuentros de amores perdidos de un ayer donde el día a día era distintos destinos plagados de hierbas para cada uno.

Hay cosas que oía, que parecían alternar con los vehículos de la imaginación.

Camisas, tan llenas de sentimientos, de pañuelos mejor entrar en caso de exagerar.

Llamada sin sentido, en caminos sin rodar en los picos de un corazón palpitando de sensaciones de llantos.

Vivir era liberar respirando el encuentro de seres distinto de ser tu.

Isabel Coronado

0 Comments:

Publicar un comentario



<< Home